27 cosas que espero de los 27

Cumplir la edad de Christian Grey y hacerlo dos semanas después de haberlo conocido en la ficción no pone las cosas fáciles en cuanto a expectativas vitales se refiere. Sin embargo, mis 27 no tendrán mucho que ver con los 27 del señor Grey. He tenido que descartar la idea de celebrar mi cumpleaños mientras piloto mi propio helicóptero o acuño mi moneda oficial sin que me importe demasiado.

Los 27 pueden parecer la edad más disfrutable del mundo desde otro punto de vista. Te dicen que sigues siendo joven pero no tan sumamente joven, has ganado cierta experiencia y a la vez no estás todavía pegado al pasado, pues son todavía más las páginas del relato que faltan por leer que las que ya has ajado.

Pero no nos engañemos. La edad (con la actitud adecuada) es solo la excusa perfecta para proponerte todas aquellas cosas con las que te sientes bien. Mi felicidad no está en Seattle ni en el marketing de autoayuda, sino que merodea como la de la mayoría en una cotidianidad a la que hay que saber sacar el jugo para que no se nos corte como la mahonesa. Así que me he propuesto 27 objetivos muy realizables y disfrutables para los próximos 365 días de mi vida.

1. Tener ganas de tener ganas de casi todo.
2. Engordar mi Excel de vinos catados y puntuados. Hacerlo con muchos vinos que superen los 4 puntos sobre 5, o en su defecto, los 70 sobre 90.
3. Terminar mi curso de sumiller y hacerlo sabiendo que nada es lo que creía en este fascinante mundo dos años atrás.
4. Seguir aprendiendo de lo mío y de lo que nunca sabré demasiado, lo que supone inevitablemente escuchar más que hablar.
5. Planificar viajes, sin importar el lugar.
6. Mandar más emails. Darle a la palabra escrita la grandeza que merece.
7. Costearse los 27 puntos de esta lista.
8. Visitar Cádiz y Lisboa, y todo lo que se ponga a tiro.
9. Llenar el vacío dejado por The Newsroom con más realidad que ficción.
10. Cuidar de las cosas buenas que me trajeron los 26. A todos ellos y a ella.
11. Incorporar a esta web un pequeño espacio de lecturas recomendadas.
12. Leer joyas de tinta y papel. Inspirarse en ellas para escribir cosas decentes.
13. Seguir aprendiendo inglés, porque nunca es suficiente, y sólo aprendes cuando te das cuenta de todo lo que te queda por aprender.
14. Ponerse las zapatillas de correr con la llegada de la primavera y el final del verano. Sentirse un pájaro bajando por Serrano y creerse Rocky llegando al Parque de Berlín.
15. Descubrir bares y restaurantes con encanto y compartirlos con quienes más quiero.
16. Seguir estando al día de las exposiciones del Prado, el Thyssen, el Reina Sofía, la fundación Maprfre, CaixaForum, Fundación Canal, etc.
17. Acudir al menos a cuatro representaciones de teatro al año. Elegirlas bien.
18. Enseñar a cada cual que me lo pida que el vino es algo más que una botella, que muchas veces no es a lo que está acostumbrado, y hacerlo sin pretensiones.
19. Tumbarse al sol cual lagarto durante algunas tardes veraniegas y primaverales en la azotea del Círculo de Bellas Artes.
20. Visitar Cibeles. Citarse con Iker allí.
21. Seguir demostrando que el cine, cuando es asequible, tiene futuro. Y por ello, seguir quemando salas, butacas y cintas cada miércoles.
22. Cumplir los 28 habiendo escrito al menos 30 entradas más en este blog.
23. Cultivar las complicidades que me hacen reir y sentirme bien.
24. Desarrollar el impagable trabajo de headhunter de la amistad.
25. Demostrar que cumplir años está para algo más que soplar velas.
26. Votar en mayo, votar en noviembre y votar con responsabilidad siempre que tengamos la oportunidad de hacerlo. Dar respuesta a los que creen que los ciudadanos no estamos comprometidos con la política cuando estamos a más de dos metros de la barra del bar.
27. Cumplir los 26 puntos anteriores y renovarlos un año después. 


* Y no, en esta lista no encontréis acrósticos como éste.

Comentarios